Por Diony Sanabia Abadia
La Habana, 3 abr (PL) Los cinco antiterroristas de Cuba presos en cárceles norteamericanas hace casi 12 años son eternos jóvenes de este país por el cual sienten un amor infinito, destacó hoy la hija de uno de ellos.
Entrevistada por Prensa Latina, en la primera jornada del IX Congreso de la Unión de Jóvenes Comunistas, la primogénita de René González, Irma González Salanueva, señaló que los luchadores están muy al tanto de este cónclave, con sede en el Palacio de Convenciones.
René, Antonio Guerrero, Fernando González, Ramón Labañino y Gerardo Hernández conocen los retos actuales de nuestros contemporáneos y el esfuerzo que hacemos por lograr su definitiva liberación, subrayó.
Mi papá, agregó la chica llamada por el diminutivo del nombre propio, está muy involucrado con cada detalle del desarrollo de la sociedad cubana y se considera parte de sus proyectos como hacen coterráneos.
Para los Cinco, conocidos así a nivel internacional, resulta imprescindible estar en Cuba, y hasta que ese ansiado momento llega se mantienen muy informados por diferentes vías de lo que acontece en la isla caribeña, apuntó.
Irmita comentó que tres días atrás regresó de visitar a su progenitor, a quien encontró con mucho ánimo y espíritu de vencer cualquier obstáculo pese al estado de encierro.
Durante uno de los encuentros, también hablé vía telefónica con Ramón, muy admirable por las muestras de apoyo que siempre ofrece y la confianza de que terminará cuánto antes la injusticia cometida.
Interrogada sobre la situación de Gerardo, condenado a doble cadena perpetua más 15 años de privación de libertad, Irmita sostuvo que su padre como los otros tres antiterroristas está muy preocupado con ese caso.
René, puntualizó, dice que no quiere luchar por la excarcelación de sus hermanos cuando él sea libre sino estar todos juntos en su amada Cuba en unión de familiares y el pueblo.
Los Cinco fueron detenidos el 12 de septiembre de 1998 cuando monitoreaban las acciones criminales de grupos anticubanos asentados en Florida, en el sur de Estados Unidos.
Numerosas pruebas judiciales y el testimonio de altos jefes militares indican que ellos nunca atentaron contra la seguridad de esa poderosa nación, autoproclamada enemiga del terrorismo cuando ampara a confesos asesinos de la talla de Luis Posada Carriles.
Ese terrorista fue el autor intelectual de la voladura de un avión cubano en Barbados el 6 de octubre de 1976 que causó la muerte a 73 personas inocentes. |