Publicado el 1 Junio 2010 en Cubadebate
En conferencia de prensa en Nueva York, a donde llegó este martes para ofrecer dos conciertos en el Carnegie Hall, el cantautor cubano Silvio Rodríguez se pronunció por la liberación incondicional de los Cinco cubanos que cumplen extensas e injustas condenas en los Estados Unidos.
“Pienso… que estos que están acá -nosotros los llamamos Héroes- debieran estar libres. Llevan más de diez años presos, con condenas completamente absurdas; tengo entendido que con muchas irregularidades de sus procesos, porque fue un juicio con mucha incidencia política en el momento que ocurrió… Era un momento en el que había una crispación…”
En este momento de las declaraciones, la CNN interrumpió la transmisión para seguir luego con la conferencia de prensa: “La Revolución es un evento circunstancial, y la evolución es una necesidad constante de la sociedad y de los seres humanos. Necesitamos evolucionar y a veces hacer una revolución”.
EEUU, UN PAÍS QUE ADMIRO
Cuando le preguntaron cómo era posible que estuviera de gira en Estados Unidos, Silvio dijo que su ausencia se había debido a que antes no le dieron vida: “yo pedí visas unas veces para cantar, otras por razones privadas y nunca me la dieron, y la razón por la que estoy aquí es porque me la dieron”, sonríe.
Silvio había perdido un poco la fe en poder visitar este país, “porque habíamos insistido bastante; incluso la última vez de una manera digamos muy lógica porque era la familia de Pete Seeger la que me había invitado, y me parecía que era una ocasión apropiada para descongelar esa situación que había”.
Pero la visa no llegó: “yo creo que por razones de tiempo. La pedimos con mucha premura, estábamos en París en esos momentos, y llegó como 20 días después. En fin, estoy muy contento de poder regresar a Estados Unidos, que es un país -aunque algunos no lo crean- que admiro en muchas direcciones, en muchos sentidos… Espero poder hacer un buen trabajo y que valga la pena para las personas que nos van a escuchar. En definitiva ese es el objetivo.”
LA POLÍTICA DE EEUU CONTRA CUBA
Sí, sin dudas, ha cambiado un poco la política de los Estados Unidos, se nota, ¿no?, dice. “Ellos han tomado medidas, han regresado las cosas a la situación entre los dos países. Me parece a mí que han vuelto a donde estaba antes de Bush. Justo ahí lo han dejado. No creo que haya avanzado algo más que eso”.
Afirma que el diferendo entre Estados Unidos y Cuba debiera terminar: “demasiado tiempo, demasiada angustia, demasiadas ausencias, demasiadas faltas, demasiados dolores. Es algo que debiera terminar, para el bien de todos”.
Para el cambio en las relaciones, “a mí me parece que sería muy importante que levantaran el bloqueo. No solo sería importante para recomenzar las relaciones entre Estados Unidos y Cuba, sino para hacer un replanteo de la vida interna de los cubanos. Eso nos ayudaría mucho también, creo yo”.
Silvio reitera, como ha dicho en múltiples entrevistas y presentaciones anteriores, que sigue creyendo en la Revolución, y que para poder “seguir manteniendo las conquistas para el pueblo que se han hecho (como la salud, la educación), que son cosas reconocidas por muchas organizaciones internacionales, no políticas, logros sociales que tiene Cuba, pero para poder seguir manteniendo incluso eso yo creo que es necesario evolucionar en algunos aspectos”.
Reconoce que el Presidente Barack Obama planteó antes de tomar posesión, una visión diferente hacia Cuba, pero “cambiar la política hacia Cuba, quizás lo pudiera hacer unilateralmente un presidente que no tuviera tantos problemas en tantos frentes diferentes como Obama, quizás lo pudiera hacer, pero teniendo tantos problemas -económicos, situación internacional, la situación médica en Estados Unidos…- supongo que tiene que invertir mucho tiempo, mucho esfuerzo en todas esas cosas.”
Sin embargo, considera que no van a cambiar las cosas con Obama: “No me parece, lamentablemente no me parece, ojalá… Pero vamos a brindar con un buche de agua por eso”.
Reconoció que España ha intentado mejorar las relaciones de Europa con Cuba, pero “la oposición española trata de que no lo haga está tratando de que no lo haga, muy evidentemente. Incluso toda esta llamada campaña mediática que se desata a raíz de la muerte de un prisionero en Cuba por inanición, cosa que respeto mucho a esa apersona que decidió hacer eso, jamás lo he condenado ni nada de eso, pues todo eso lo ha usado la derecha española para tratar de socavar la intención de gobierno actual español de que se mantenga la Posición Común de la Unión Europea con respecto a Cuba”.
Admite que se ha estado desatando “una campaña tras otra; hacen una plataforma, al día siguiente hacen una torre de cristal, en fin todos los días hacen un evento diferente en esa dirección.”
Silvio reconoció que Fidel no aparece mucho en público, pero de vez en cuando se le ve de pronto en las calles, porque “camina o corre, no. Hay personas que lo han visto… Vieron a Fidel en la esquina de tal o de cual, eso se rumora… Pero él no ha vuelto a salir en público a menos que reciba a un visitante, un Jefe de Estado, un amigo personal… El está vivito… y coleando, y coleando.”
Acerca de la Ley de Arizona, Silvio admitió que es “una ley controvertida, una ley dura, que prácticamente lo que desata es una persecución, mal pensada, mal concebida y que por eso ha despertado tal rechazo. Y me parece bien que se repudie porque no trata bien a los seres humanos.
EL MÚSICO QUE FUI SE DEBE TAMBIEN A LA MÚSICA DE EEUU
Pasando a temas culturales, el cantautor cubano dijo que le asombra que a sus conciertos vayan tantos jóvenes. “A mí lo que se me ocurre es que como yo empecé a componer joven he mantenido esa misma actitud mental ante el hecho de la composición, y ante el hecho de la música, y ante el hecho de la poesía, y ante el hecho de la necesidad de comunicación con los demás”, admite.
“He tratado de mantener ese espíritu que me inicié, he tratado de mantener vivo eso, que haya en mis canciones esa llamita joven, y que eso sea lo que comunique a los más jóvenes”, añade.
Silvio reconoce que su música es “una trayectoria por mis preocupaciones, por mis ocupaciones que están reflejadas en mis canciones… Uno decide llevar a las canciones la s cosas que considera en determinado momento que son importante, aunque al día siguiente no lo parezca. A veces pasa, pero a veces ese momento circunstancial que te hace hacer una canción o decir una cosa aunque por momento es transitorio en una canción se queda vivo, y le sirve a otra persona en otro momento de la historia, porque todos tenemos una vida no parecida, pero sí común y nos ocurren cosas bastante similares. O sea que lo que pretendo es cantarle canciones donde se puedan encontrar”.
Admite que en su obra se reconoce la influencia de la música norteamericana y en particular, el cine: “Mi familia era muy cinéfila y con 20 días mi madre me llevó al cine. Las partituras para películas en la década de los 50 fueron magistrales y algunas composiciones se han quedado como referencia en la memoria colectiva de mucha gente. Recuerdo muchas películas que aunque no fueron musicales se te quedaban en la cabeza. La música de Vértigo (de Alfred Hitchcock) no te abandona, lo mismo que la de de Duke Ellington en El hombre del brazo de oro (protagonizada por Frank Sinatra). Ese contacto con el cine de los Estados Unidos, que fue un gran transmisor de música, es lo que incorporé a mi trabajo. Eso, unido a la amalgama musical que escuchaba cada día en Cuba es lo que hizo de mí el músico que después fui”.
Ante la pregunta de qué está haciendo ahora, Silvio responde: “Cuando no ando como periodista estoy de compositor. Estoy haciendo música para cine ahora”.
Comenta sobre su último disco, Segunda cita, “que acabo de lanzar hace dos meses en La Habana, es un disco de canciones mucho más recientes, canciones de 2008, 2009, alguna de 2003. Y es cierto que después de tantos años, uno no es que se aburra, es que se cansa y quiere hacer otras cosas”.